Coyhaique - Cerro Castillo
Hice el camino pavimentado entre Mañihuales y Coyhaique rápido pues quería llegar con luz. Ahora pienso que mejor decisión era irse un poco más lento y llegar más en la noche. En fin son decisiones que uno toma cuando lleva mucho rato arriba de la moto y a veces el razonamiento no es el mejor en ese momento. Algo que se podría llamar “idiotez del camino”.
La experiencia va haciendo que uno se de cuenta antes de estas cosas y pueda así minimizar el riesgo.
En Coyhaique aloje donde un amigo que trabaja en la municipalidad ( www.jovenesalserviciodechile.cl), me invito a comer un asadito donde un amigo de el que resulto ser de mi colegio. Antes de la comida me pegue una buena ducha , que me repuso del frío que sentía luego de llegar por el valle del Simpson. En la comida también habían un par de guías de pesca con mosca, así que pude escuchar de primera líneas algunos datos de pesca. También reconocieron que son pocos los lugares en Coyhaique donde se puede pescar un gran trofeo de 3 kilos fácilmente. En general las truchas promedio andan entre medio kilo y un kilo.
Al día siguiente me desperté tipo 10, el día estaba espectacular para seguir rumbo al sur.
Arme la moto, reduje peso ( deje la carpa o sea unos 2 kilos menos y comida) pues sabía que el camino sería más malo y no quería terminar con el chasis en la mano. Tipo 10 u 11 estaba dejando la ciudad y rodando por el camino, pavimentado de cerro castillo, un camino lleno de curvas que bordea un riachuelo muy transparente pero demasiado chico y ventoso para pescarlo.
Relajado con el día y buscando no caer en lo mismo de ayer ( idiotez del manejo)
La salida sur de Coyhaique es muy bonita, el camino bordea el imponente cerro McKay, con sus grandes paredes de roca viva y muy pálida, luego se pasa por unas lagunas y se llega al desvío que conduce al aeropuerto de Balmaceda, desde el camino se ve hacia el Sur oriente, unas planicies que son el anticipo de
Camino para superbikes
lleno de curvas, y en gran parte por el paisaje. Si a esto se suma un día de Sol ya es majestuoso.
Luego de llegar al punto más alto del cañón el camino comienza a descender por unas curvas 180°, a la derecha entre nubes esta uno de los lugares que más me gusto, el cerro torre y el cerro castillo, el cerro Torre es un majestuoso tótem de piedra de gran altura y nieve eterna, que me hacía recordar la montaña Moria que describe Tolkien en el señor de los anillos. Una vista hipnotizante.
Luego de recorridos 100 kms desde Coyhaique y con el cerro Torre de fondo, se pasa por un desvío que en pocos metros lleva a Villa Cerro Castillo, un best value de
La bomba de bencina
Luego de un buen almuerzo en la pensión restaurante, salí a recorrer por ahí, el gringo me había dicho que había una laguna a la que se llegaba por un camino que bordeaba la pista de aterrizaje del pueblo y el cementerio.
Carnicería para un pueblo de 300 persona, uf!!! que parrillas se deben poner!
Puse la moto en modo pesca y me fui a buscar el río prometido, al principio luego de recorres unos senderos y pedir permiso en una casa, llegue a ninguna parte, decidí deshacer el camino, hasta un punto en que se veía el río que era ancho y con muchos juncos, deje la moto “camuflada” entre unos árboles pase una reja y llegue a unas especies de lagunas en que había mucho viento
Buscando truchas
…..luego de un par de intentos, recogí mis cosas y volví a
Río Manso, esta foto me la tomo un par de familias que iban en un viaje familiar, creo que quería llegar hasta Punta Arenas
Rio Ibañez, un verdadero cajón
Agarré la fiel moto nuevamente, que para eso estaba, y me devolví hacia la serie de lagunas que se encuentran por ahí, las ardillas, etc. Anduve por unos parajes solitarios ( un camino que conecta el sector de la cueva de las manos con Río Ibanez), y caminos bien malos , aquí fue la única vez que se en una curva ciega de confiado me falto distancia para frenar y me pase al lado izquierdo del camino, luego de retarse a mi mismo seguí.
Pase por muchas lagunas, varias propiedades, una de ellas con un viejito que muy amablemente me dejo pasar, (aunque el camino me tinca que era publico pues salía en el turistel). El problema era que no encontraba ríos!!! Solo lagunas bien protegidas por juncos y árboles que hacían de la pesca de un imposible. Finalmente luego de varios kms de caminos preciosos pero sin ríos, decidí volver. Ya empezaba a atardecer, la gracia de rehacer un camino al revés es que todo parece distinto.
Un buen lugar
Compañia!
Éxito
gracias a esto logre ver una laguna que tenía acceso entre la tupida vegetación, me salí del camino principal, estacione la moto y camine bordeando un sendero que bajaba a la laguna, las truchas estaban saltando, pese a que no es lo ideal pescar una laguna de orilla, por los juncos que hay en sus bordes, encontré un lugar despejado y logré pescar una linda trucha fario, que luego fue devuelta.
Ya feliz y con poca luz inicie el retorno a Cerro Castillo.